El selenio es un micronutriente esencial que fortalece el sistema inmune y previene enfermedades crónicas, y puede incorporarse a la dieta a través de lácteos enriquecidos. El proyecto europeo Se4All trabaja en Argentina junto a INTA e INTI para desarrollar productos lácteos funcionales con este mineral clave para la salud.
El selenio es un micronutriente esencial que el cuerpo humano no puede producir por sí mismo. Su aporte se da a través de los alimentos, pero solo cuando se encuentra en formas orgánicas llamadas selenoaminoácidos, que cumplen funciones clave en la fisiología. Estos compuestos mejoran el sistema inmune y ayudan a prevenir enfermedades crónicas, como las cardiovasculares y algunas neoplasias.
Cómo los lácteos pueden aportar selenio a la dieta diaria
El desafío está en cómo incorporarlos de manera efectiva a la dieta cotidiana. Las plantas y ciertas levaduras pueden sintetizarlos, y al ser consumidas por los animales, los transfieren a su sistema proteico. Así, las vacas que se alimentan de alfalfa enriquecida con selenio logran que estos nutrientes pasen a la leche, permitiendo que los productos lácteos —y sus derivados como quesos o yogures— se transformen en alimentos funcionales, con beneficios adicionales para la salud.
“Lo importante es entender en qué formas pasa el selenio a la leche, qué tipo de selenoaminoácido se genera”, explicó a AIRE Agro el profesor de Química de la Universidad Autónoma de Barcelona, Manuel Valiente, coordinador del proyecto de investigación europeo Se4All – Selenio para todos.

El proyecto Se4All y la participación argentina
Con el objetivo de desarrollar productos lácteos enriquecidos con selenio, nació el programa Se4All, financiado por Horizonte 2020 de la Unión Europea y coordinado inicialmente por Valiente. En noviembre de este año, el liderazgo pasa a su colega María Jesús Sánchez.
El proyecto fue impulsado por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), junto al Sincrotrón ALBA (España), la Universidad de Roma La Sapienza, la Red Europea de Innovación (REDINN), la Universidad Nacional del Litoral (FCA-UNL), INTA Rafaela, INTI Rafaela y la Granja Agroecológica Beal (Irlanda).
Argentina ha tenido un rol central durante los últimos cuatro años, no solo en la investigación científica sino también en la validación práctica a través de sus tambos y empresas lácteas. El proyecto culminó recientemente con el 4º Workshop Internacional en el Centro Comercial e Industrial de Rafaela y la Región, donde además de las actividades académicas se realizaron visitas a tambos del INTA y a plantas productivas.
“Con INTA e INTI llevamos trabajando más de 12 años; la respuesta siempre ha sido muy buena, hay excelentes profesionales y, sobre todo, una gran voluntad de generar y transferir conocimiento a la praxis industrial”, destacó Valiente.

Potencial y futuro de las leches funcionales con selenio
El consumo de alimentos enriquecidos con selenio ya es una tendencia consolidada en países desarrollados, donde existen productos selenizados no solo lácteos, sino también cárnicos como pollo y cerdo.
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Para Valiente, el desafío no es solo productivo, sino también educativo: “La introducción en el mercado debe hacerse a través del conocimiento del consumidor sobre las propiedades que ayudan a la salud. No basta con escalar el producto y ponerlo a la venta, también hay que generar información sobre sus beneficios”.
Desde Europa, la cadena láctea argentina es vista con gran potencial. “Argentina sigue viéndose como un país muy rico, con grandes posibilidades. Sus niveles educativos son bastante buenos, lo que facilita la colaboración para generar expansiones conjuntas”, concluyó Valiente.